- Por: Guadalupe Orta
Mientras el presidente municipal Felipe Fernando Macías Olvera asegura que su administración promueve el orden a través del llamado “Plan Orden”, la Feria Artesanal instalada en el Jardín Guerrero suma ya su segundo día consecutivo de conflictos entre grupos de artesanos y autoridades municipales. El lunes, el grupo encabezado por Adela Pedro rechazó participar en el sorteo de espacios; este martes, integrantes del grupo de Paula Porfirio se colocaron por su cuenta en Plaza de Armas y en el andador 5 de Mayo, argumentando trato desigual en la asignación de lugares.
A la par, un grupo de artesanos denunció exclusión, desorganización y trato desigual en la Feria Artesanal instalada en el Jardín Guerrero durante el periodo vacacional de Semana Santa. De acuerdo con los testimonios, pese a haber participado en ediciones anteriores, no se les permitió formar parte del sorteo de espacios ni se les informó con antelación sobre la convocatoria para integrarse al evento.
Integrantes del colectivo Kidantsi y otros dos grupos que en total suman alrededor de 13 personas, afirmaron que el sorteo de lugares se realizó a puerta cerrada, asimismo acusaron que representantes del gobierno municipal, les impidieron el acceso debido a que no estaban en el registro oficial de artesanos.
El grupo señaló que no fueron incluidos en ese padrón debido a que no forman parte del Mercado Artesanal, espacio en el que, según denunciaron, se limita el acceso y se condiciona la participación a vínculos con líderes internos.
“Nos están orillando entonces a que hagamos lo mismo. Y ayer nos pusimos aquí en el piso y solo entonces vinieron y se acercaron y dijeron: ‘No, no, no, espérense, les vamos a solucionar’, pero aun así, no nos solucionaron hasta la noche”, señaló Remedios, una de las afectadas.
Indicaron que hay personas dentro de la feria que lucran con los espacios y que existe evidencia de reventa o asignación discrecional de los mismos. También señalaron que el gobierno no ha realizado un censo real de artesanos, lo que deja fuera a grupos con trayectoria comprobada.
Tras permanecer más de doce horas sin respuesta y sin un lugar asignado, finalmente se les permitió instalarse, aunque sin el apoyo logístico que reciben otros participantes. Denunciaron que no se les proporcionaron carpas, tablones ni sillas, y que tuvieron que conseguirlos por su cuenta, enfrentando además complicaciones para el traslado del mobiliario prestado por la Dirección de Artes y Oficios.
Señalaron que hubo falta de coordinación entre dependencias municipales, ya que fueron enviados entre la delegación, la Dirección de Inspección y concertadores, sin obtener una solución concreta. A pesar de ello, los artesanos decidieron instalarse por necesidad, aunque reconocieron que lo hicieron en condiciones desiguales respecto a otros grupos.
