Ricardo Anaya acusó al gobierno federal de “agandallarse” la nueva Comisión Reguladora de Telecomunicaciones, organismo que sustituirá al Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT). Dijo que el propósito es concentrar el control de los medios y del árbitro regulador en manos del oficialismo.
Según el excandidato presidencial, tres de los cinco perfiles propuestos para integrar el nuevo órgano son empleados actuales de José Merino, y una cuarta persona trabajó con él hasta abril. Para Anaya, esa composición revela el intento del gobierno por imponer un organismo sin independencia ni contrapesos reales.
“Controlar al árbitro es hacer trampa”, advirtió, al sostener que Morena pretende tener el control total sobre los medios de comunicación y los espacios de regulación pública.
Anaya también denunció que la iniciativa viola la Constitución, ya que el Senado no tiene facultades para ratificar los nombramientos de un órgano que no existe en el texto constitucional. “Quieren agandallar al árbitro, violar la Constitución y controlar el discurso público”, sentenció.
La creación del nuevo organismo, añadió, es una maniobra política para desmantelar los contrapesos y someter la regulación de las telecomunicaciones a intereses partidistas, en lugar de garantizar la libertad de expresión y la competencia.