Morena volvió a cerrar filas para proteger a los más ricos. Durante la discusión de la Ley del IEPS, la mayoría oficialista y sus aliados rechazaron una propuesta que buscaba imponer impuestos a los jets, yates y helicópteros privados, presentada por la diputada Laura Ballesteros, de Movimiento Ciudadano.
La legisladora advirtió que las reformas fiscales impulsadas por Morena “castigan a quienes menos tienen” y no tocan a las grandes fortunas ni a los principales responsables de la contaminación.
“Están cargando el peso de las finanzas públicas a las personas de a pie, a los jóvenes, a las familias más marginadas. ¿Por qué no dirigen esa carga fiscal a las grandes corporaciones y a los milmillonarios del país?”, cuestionó.
Ballesteros propuso aplicar un impuesto especial con tasas progresivas de hasta 30 % sobre el valor de jets, yates y helicópteros privados, bajo el principio de que “si el pueblo paga la tenencia de sus coches, los ricos tienen que pagar la tenencia de sus aviones y de sus barcos”.
La propuesta incluía destinar esos recursos a obras de infraestructura resiliente, programas de protección ante desastres naturales y proyectos de descarbonización. Pero Morena optó por rechazarla sin siquiera abrir la discusión, evidenciando —una vez más— su falta de voluntad para tocar los privilegios de las élites económicas mientras insiste en mantener cargas fiscales sobre la población trabajadora.
