La presidenta de la Cámara de Diputados, Kenia López, aseguró que la discusión de la polémica reforma a la Ley de Amparo tendrá un proceso transparente y exhaustivo en San Lázaro, marcando una clara diferencia con la celeridad con la que el Senado de la República aprobó la minuta.
“Yo garantizo que se respete la Ley Orgánica y el proceso legislativo. No habrá fast track en lo que a mí corresponde como presidenta de la Cámara de Diputados”, declaró López, comprometiéndose a un manejo institucional del tema.
La ruta legislativa iniciará con la recepción formal de la minuta enviada por la Cámara Alta. Posteriormente, la Mesa Directiva dará cuenta del documento al Pleno y lo turnará a las comisiones correspondientes para su análisis y dictamen.
López prometió un debate “amplio, plural y abierto a la ciudadanía”. No obstante, la líder cameral reconoció que, dentro del trabajo de comisiones, la mayoría parlamentaria mantiene la capacidad de acelerar la emisión del dictamen sin incluir modificaciones de fondo al texto.
Actualmente, los grupos parlamentarios en la Cámara de Diputados preparan una cantidad considerable de objeciones. La presidencia informó que las bancadas alistan decenas, incluso cientos, de reservas que presentarán durante la discusión en el Pleno.
